Mi historia
Mi familia me inculcó el valor del trabajo duro, el servicio y, sobre todo, la responsabilidad por nosotros mismos, nuestra comunidad y nuestro futuro.
Una breve reseña sobre mi
Mi nombre es Carolina Goic Boroevic. Nací el 20 de diciembre de 1972 en Santiago de Chile. Estoy casada con el biólogo marino y fotógrafo de naturaleza, Christian Kirk Miranda, con quien tenemos dos hijas, Catalina y Alejandra.
Cuando era muy pequeña llegué a vivir a la región de Magallanes y la Antártica Chilena, de la cual me siento una hija más, y donde también reconocí mis orígenes croatas en una tierra marcada por la inmigración de ese país europeo. Debido al trabajo de mi padre también viví parte de mi infancia en Ecuador, de donde guardo los mejores recuerdos.
Soy Trabajadora Social y Magíster en Economía Aplicada de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Toda mi vida la he dedicado al servicio público, primero en cargos de gobierno en la región de Magallanes y la Antártica Chilena y luego como diputada por dos períodos y uno como senadora en la misma zona; dieciséis años en total.
Pese a tener la posibilidad legal y todas las chances de ganar al ir por un segundo período como senadora decidí no repostular, pues soy una convencida que debe haber una renovación permanente de la política y por eso también apoyé con fuerza la ley que pone límite a la reelección.
Durante mi trabajo parlamentario he puesto especial énfasis en sacar adelante iniciativas que ayuden a las personas a conciliar su vida laboral con su vida personal; en facilitar la inclusión e igualdad de oportunidades para las mujeres pues considero que esto, junto con ser un mínimo ético, es un factor clave para el desarrollo integral de nuestra sociedad de cara al Siglo XXI.
Asimismo, impulsé leyes que resguardan la maternidad y el apego entre la madre y sus hijos e hijas, como la extensión del Posnatal a seis meses, entre muchas otras. También impulsé normativas y planes para prevenir el consumo de alcohol y drogas en los adolescentes basados en el denominado “Modelo Islandés”.
Especial cariño y orgullo me produce ser la autora de la Ley Nacional del Cáncer, una iniciativa surgida desde la sociedad civil a través del Foro Nacional del Cáncer y que luego trabajamos de la mano de las agrupaciones de pacientes y especialistas médicos, en una lógica colaborativa inédita hasta ese momento en Latinoamérica.
Uno de los desafíos más hermosos que me ha tocado enfrentar fue la candidatura presidencial que asumí en nombre de la Democracia Cristiana el año 2017. Si bien no resulté electa, tuve la posibilidad de recorrer todo Chile y conocer la realidad y los sueños de la gente de norte a sur. Logramos instalar varios temas, pero, de manera especial, la importancia de la ética en la función pública como pilar de cualquier gobierno.
Esta es solo una parte de mi historia, la que sigo construyendo día a día. Si quieres ver en qué estoy te invito a visitar mis redes sociales.